Que me salve un tango

El tango ha sido sido siempre un pozo sin fondo de inspiración y recurso musical en todos los rincones del mundo. El poeta argentino Enrique Santos Discépolo perpetuó la definición del tango como "un pensamiento triste que se baila".
Sólo sé que oigo un tango del maestro Astor Piazzola y se me cura todo. De hecho recomiendo su "Balada Para Un Loco" para roturas de embrague, correa del alternador y tensor del mismo con sendas facturas astronómicas.

De momento sin efectos secundarios.

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